Antiguos alumnos (I)

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CUANDO ALGO TERMINA ALGO NUEVO COMIENZA

Si por algo recuerdo a Esmeralda es por ese amor por las palabras que supo transmitirnos a todos cuando nos disponíamos a cruzar la línea de la mayoría de edad y la única palabra que parecía importar era “PAU”. Es por ello por lo que cuando comencé a leer “La seducción de las palabras”, de Alex Grijelmo, me acordé de ella y decidí escribirle un correo electrónico. Así comenzó una cadena de correos, tan frecuentes como nuestras agendas nos lo permitían, que desembocó en la propuesta de esta sección por parte de Esmeralda.
He tenido oportunidad de leer algunos de vuestros comentarios del blog y he de decir que me habéis sorprendido gratamente. Estoy segura que vosotros también os sentís muy orgullosos del progreso que habéis hecho este curso. ¿Acaso no os parece maravilloso tener las herramientas para expresar de forma precisa lo que reside informe en vuestra mente? La lengua es como un Lego con el que, según qué piezas utilicemos y como las combinemos, podemos crear una figura u otra.
Pese a mis estudios basados en los números y las leyes físicas, nunca he pensado que las letras y las palabras jueguen un segundo plano. “Quien controla las palabras controla su vida” solía decir Esmeralda. Por entonces no era consciente de a qué podía referirse con aquella cita, pero con el tiempo he descubierto de qué hablaba. Es importante utilizar los términos correctos para defender nuestras ideas, exponer nuestros argumentos, declarar nuestra intención o expresar nuestros sentimientos. Esta frase atraviesa la puerta de las aulas y pasa a ser la esencia de la vida real y de las relaciones interpersonales. Para ser quién eres tienes que decir lo que piensas y que tus pensamientos y sentimientos se encuentren en sintonía. La expresión verbal es el último eslabón de la cadena y el más importante pero, como bien sabréis, no siempre es fácil encontrar las palabras adecuadas. Es por ello que requerimos de práctica y de aprendizaje (que no estudio). Dentro de unos meses… ¡sois libres de aprender lo que queráis! Desde este escritorio y a través del blog os deseo que aprendáis mucho, que aprendáis de todo. Viajad, conoced gente, ganad experiencias, leed aquello que os guste y escribid. ¡Os deseo muchos momentos inefables! (Añadid esta palabra a vuestro pequeño diccionario personal, ¡sirve para describir lo indescriptible!)
Ya solo queda la recta final. Coged aire porque es una cuesta empinada, pero ¿no es cierto que cuanto más pendiente tenga, más arriba llegaremos? Y entonces solo os queda echar la vista atrás y ver todo lo que habéis recorrido. Pero ¡eh!, no tan rápido… aún hay que empezar a subir.
Espero poder seguir disfrutando de vuestras reflexiones, opiniones, inquietudes, conclusiones y, en definitiva, de vuestras palabras. Nos leemos en esta sección que me complace inaugurar y espero sea el comienzo de un punto de encuentro de letras y de personas.
¡Nos leemos! Aunque esto acabe…
Marina Vargas Ruiz, exalumna del IES Tomás Mingot

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